Las vacunas que usan adenovirus no cambian el genoma humano ni eliminan los derechos humanos
Los adenovirus no tienen interacción con el genoma y los derechos humanos son imprescriptibles.
En Telegram circula un video de la médica argentina Chinda Brandolino, en el que afirma que las vacunas de adenovirus modifican el genoma humano (conjunto de secuencias de ADN) de las personas y las hacen “transhumanas”, por lo que perderían sus derechos humanos. ChequeaBolivia advierte que se trata de información falsa.
Para conocer su funcionamiento y el por qué no pueden cambiar el genoma humano hay que observar cómo operan las vacunas que utilizan vector viral (adenovirus) en el organismo. Según el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés), estas vacunas funcionan mediante la inserción del código genético de la espiga S del coronavirus (las puntas características que tiene en la superficie) en un adenovirus inactivo, para que éste transporte la información del coronavirus al cuerpo. Estos adenovirus se desintegran en las células sin cambiarlas, dejando expuesta la información genética de la espiga S del coronavirus en la superficie de las mismas para que el sistema inmune la detecte y aprenda a defenderse del virus sin padecer la enfermedad.
Al respecto, ChequeaBolivia consultó sobre el tema a Mauricio Arraya, médico inmunólogo y alergólogo del Hospital de Clínicas de La Paz, quien explicó que “cuando se inocula la vacuna, la parte que tiene que generar la respuesta inmune, en realidad la realiza justamente esta célula, la célula dendrítica. Y durante todo ese proceso no tiene interacción con su genoma, entonces la célula dendrítica una vez que procesa bien las partículas que se administraron mediante la vacuna presenta esas partes a distintos grupos celulares, en este contexto a linfocitos T, que potencian la respuesta inmune”.
Sobre si las personas pueden perder sus derechos humanos, ChequeaBolivia contactó a Rossana Zapata, experta y docente en Derecho Internacional de la Universidad Mayor de San Simón (UMSS), quien afirmó que ese extremo es “imposible, pues (los derechos humanos) son universales, indivisibles, imprescriptibles. Y la teoría, la doctrina del derecho internacional público establece que, aunque los tratados se disolvieran igual seguirían en la costumbre. Porque en el derecho internacional público tenemos dos fuentes de producción de normas equivalentes; una de las fuentes es la costumbre y la otra es el iuspositivismo o el tratado. Entonces si se disolvieran en el ámbito del iuspositivismo siguen existiendo en el ámbito de la costumbre, porque es la práctica de los estados de data inveterada”.
Infografía CDC sobre las vacunas que usan vectores virales
FUENTES:
Médico inmunólogo y alergólogo del Hospital de Clínicas de La Paz, Mauricio Arraya.
Docente en derecho internacional de la Universidad Mayor de San Simón, Rossana Zapata.
Centro para el Control de y la Prevención de enfermedades de los Estados Unidos
Tendencia Política
- Log in to post comments