Por Lucas Illanes y Enid López 

En las últimas semanas, ciudadanos de diferentes regiones del país reportaron diferentes eventos sísmicos. El último tuvo lugar el 24 de julio, con epicentro en la región del trópico cochabambino y fue de magnitud 4,6 grados a una profundidad de 15 kilómetros (superficial). Pero, las estadísticas oficiales reportadas por el Observatorio de San Calixto (OSC) sobre actividad sísmica en Bolivia dan cuenta que los datos están dentro del promedio normal.